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Horno a leña

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Características y funcionamiento

Un horno de leña es una herramienta de cocción que funciona del mismo modo que un horno de estilo convencional eléctrico o de gas. No obstante, la principal diferencia radica en que el calor es de leña y eso otorga un sabor especial a las comidas, algo que por lo general no comemos a diario. Por ello, en función del tipo de leña obtendremos un sabor u otro. De esta manera, podemos cocinar lo mismo que en un horno de cocina de un restaurante.

Por tanto, el secreto está en los materiales usados para construirlo, con paredes que retienen el calor por horas y que posibilitan que el horno aproveche mejor los recursos. Así, el rendimiento es óptimo. Otra de las ventajas es que estos hornos suelen cocinar los alimentos en el suelo del mismo, que también se calienta y es refractario.

Así, podremos colocar el pan o las pizzas directamente, sin necesidad de contar con bandejas, lo que motiva que estos alimentos presenten una textura diferente a lo usual, constituyendo este un rasgo distintivo de estos hornos.

Materiales y particularidades del horno a leña

Se trata de un elemento ideal para ubicarlo en el exterior al estar construido con piedra para soportar el calor. De hecho, los principios básicos por los que se rige el funcionamiento de un horno a leña son el flujo del calor con el aire y la refracción del calor.

El primero se basa en un modelo canadiense en el que la única puerta está en la parte frontal, lugar por el que entra la leña y el aire preciso para realizar la combustión. El aire entra frío, pasa por el calor de las brasas y sale por la puerta de la chimenea, conduciendo a una situación de igualdad de calor dentro de las paredes del horno.

El segundo principio necesita de materiales como ladrillos de barro cocido, hormigón, hierro, cal o arena, los cuales propician que el calor quede dentro de la cúpula durante el mayor tiempo posible. De este modo, estos hornos cumplen con las condiciones de salubridad exigidas y permiten que podamos cocinar con total confianza. El ladrillo que usamos no dispone de porcentajes altos de hierro, de ahí que no afecte a la comida cuando se calienta. De hecho, el secreto de este método es que los materiales guarden el calor en lugar de repelerlo.

¿Cómo preparamos el horno a leña antes de cocinar?

Estos hornos suelen tardar unos 45 minutos en preparar el espacio para poder cocinar, por lo que antes de introducir los alimentos deberás cerciorarte de que la temperatura es la idónea. No obstante, esto también dependerá de factores como el tamaño del horno, la humedad del momento (no es lo mismo cocinar en invierno que en verano), el tipo de leña y de los propios alimentos.

A la hora de comprar un horno de este estilo es necesario que tengas en cuenta las dimensiones de tu hogar, así como la posibilidad de conectarlo con el exterior, ya que no has de olvidar que debe contar con una buena toma de salida para que los gases salgan al exterior.

Como ves, un horno a leña es un elemento bastante útil que te permitirá poder elaborar comidas diferentes con un auténtico sabor a brasas.

¿Por qué optar por un horno a leña?

Desde hace unos años, la gente está tomando conciencia de la importancia de los hornos de leña, las razones pueden ser diversas, entre las que podemos destacar las siguientes:

–         TRADICION:  todos hemos conocido algún horno de familiares, padres, abuelos etc., hornos de antaño con los que se hacía el pan, que duraba varios días sin endurecer, así como todo tipo de comidas, sobre todo asados y guisos, los cuales). 

–         MEDIO AMBIENTE Y ECONOMIA:  El único combustible que se usa es la leña, fácil de obtener y que a la vez limpia el monte, es económico y ecológico, una energía fácil de conseguir que respeta el medio ambiente y de reciclaje.

–         VERSATIBILIDAD: Es el horno de leña el “electrodoméstico” más antiguo del mundo, se pierde en los albores de los tiempos el conocimiento de sus comienzos, ya en Europa central en los años 30000 al 29000 ac, ya aparecen los primeros, consistente en un agujero en el suelo, tapado con piedras y tierra y a esperar que el calor haga función. A pesar del tiempo transcurrido, el fin es exactamente el mismo, con la particularidad de que se pueden hacer todo, absolutamente todo tipo de comidas con cualquier tipo de producto, carnes, pescados, verduras, panadería, asados, guisos, incluso en algún país del este los utilizan también a baja temperatura para la deshidratación de alimentos, frutas, verduras, setas etc.  Una verdadera herramienta para el arte de la cocina.

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